-Me gustan las cabelleras
-sí, a mí también me guastan los descabellados
-dije cabelleras...
-y a mí los caballos
-entonces a mí los caballeros
-y a mí los caballetes...
:-)
Ya, desengaño mío,
llegasteis al extremo
que pudo en vuestro ser
verificar el serlo.
Todo los habéis perdido;
mas no todo, pues creo
que aun a costa es de todo
barato el escarmiento.
No envidiaréis de amor
los gustos lisonjeros:
que está un escarmentado
muy remoto del riesgro.
El no esperar alguno
me sirve de consuelo;
que también es alivio
el no buscar remedio.
En la pérdida misma
los alivios encuentro:
pues si perdi el tesoro,
también se perdió el miedo.
No tener qué perder
me sirve de sosiego;
que no teme ladrones,
desnudo, el pasajero.
Ni aun la libertad misma
tenerla por bien quiero:
que luego será daño
si por tal la poseo.
No quiero más cuidados
de bienes tan inciertos,
sino tener el alma
como que no la tengo.
Hacerlas no es tan sencillo como pensaba. Ergo...Olvidarte tampoco lo será |
«¿Qué es la coquetería? Podría decirse que es un comportamiento que pretende poner en conocimiento de otra persona que un acercamiento sexual es posible, de tal modo que esta posibilidad no aparezca nunca como seguridad. Dicho de otro modo: la coquetería es una promesa de coito sin garantía». - La insoportable levedad del ser, Milán Kundera.
Imagen: Wikipedia |
En lugar de preguntarle a alguien cuántos años tiene, lo acertado sería preguntar que cuántos ha vivido.
— Bloody (@lapetitebloody) Mayo 14, 2014
Imagen: goo.gl/paIwzn |